¿Acaso no vas a los conciertos de tus amigos? ¿Por qué no los grabas? Puedes hacer un umplugged, o uno más eléctrico. Pero seguro que es un gran recuerdo.
Cualquier evento en el que participen tus hijos: una obra de teatro, una fiesta de disfraces, una excursión al campo… son tan imprevisibles que llenarán tus vídeos de alegría y acción.